El texto de hoy subraya la figura de Abraham, y nos va desgranando todos los aspectos que podemos admirar de este personaje; antes de hacerlo en cada uno de ellos comienza siempre con estas palabras: «Por la fe…» Pero, para que no haya dudas sobre lo que podemos entender por fe, dice esto: «La fe es fundamento de lo que se espera, y garantía de lo que no se ve».
Pues bien, tomemos por modelo Abraham y contestamos, ¿qué poseemos anticipadamente, qué conocemos de antemano?
Señor, que siempre sea consciente de que me posees: soy tuyo y Tú me lo das todo