Sa 2, 12.17-20
Me parece que muchos podemos constatar que el libro de la sabiduría tiene razón cuando dice al comienzo de la lectura de hoy: «Se dijeron los impíos: «Acechemos al justo, que nos resulta fastidioso: se opone a nuestro modo de actuar, nos reprocha las faltas contra la ley y nos reprende contra la educación recibida». Ser coherente con los valores y las convicciones aunque eso nos lleve a donde nos lleve. ¿Puede haber un margen para ser flexible en nuestras convicciones? ¿Tenemos el peligro de ser rígidos y que nos acusen de reaccionarios? ¿Qué significa creer que, como dice el libro de la Sabiduría, Dios nos protegerá?
Señor, que con el salmista siempre te diga: Dios poderoso, hazme justicia. Sálvame, por tu nombre.