Isaías nos remarca: «Dice el Señor: «Si no intentas hacer caer a los otros, ni los señalas con el dedo pronunciando un maleficio, si das tu pan a los pasan hambre y satisfaces el hambre de los indigentes, se llenará de luz tu oscurida, y tu atardecer será claro como el mediodía».
¿Qué haré hoy para que mi vida se ilumine? Isaías nos lo dice claro: haciendo obras de misericordia.