Hoy, en la fiesta de St. Gregorio, las palabras de Pablo a los corintios nos dicen muy claramente cuál es la actitud que debe tener cualquiera que hace un servicio a la Iglesia: «no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como siervos vuestros por Jesús». ¿Conoces personas que cuando hablan de Dios, ellos se convierten en el centro de atención, más que Jesucristo?
Señor, que siempre sea su servidor.