La catequesis de Pedro no es bien acogida por los principales de la ciudad, pero Pedro vuelve a dar testimonio de su fe en un ambiente hostil y dice lo que cree. ¿Somos capaces de exponer el contenido de nuestra fe, a pesar de que el ambiente no sea favorable?
Señor, acuérdate de los que no tiemblan ante los adversarios de su fe y, si yo me encuentro ante ellos, que el miedo no me absorba, sino que me ilumine la convicción de que vivo en la verdad.