En el libro de Jeremías leemos: «Esto dice el Señor: «Esta fue la orden que di a mi pueblo: “Escuchad mi voz. Yo seré vuestro Dios, y vosotros seréis mi pueblo. Seguid el camino que os señalo, y todo os irá bien”». Nosotros, como el pueblo de Israel caminamos hacia la tierra prometida.
Señor, apiádate de todos nosotros si no somos capaces de ser fieles a tu camino.