La predicación de Pablo tiene dificultades; no todo el mundo la acepta porque ven contradicciones. Él se ve obligado a defenderse: En una entrevista «les expuse el Evangelio que predico entre los gentiles, aunque en privado, a los más cualificados, no fuera que caminara o hubiera caminado en vano». Esto conllevaba un estilo de hacer las cosas que algunos, a veces, aceptaban; y, otras veces, se avergüenzan y disimulaban. Pablo no es aceptado públicamente: ¿vivimos, actualmente, esta misma experiencia de no aceptación en algunos aspectos de la fe? ¿Qué es lo que lo hace más reprobable?
Señor, que no haga de lo que debería ser flexible, algo rígido; y, de lo esencial, algo relativo.
Última actualització: 9 octubre 2024