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8 de junio 2025 San Medardo y san Máximo, dedicación de la catedral de Tortosa y san Jaime Berthieu

Hoy, día 8 de junio, celebramos la festividad de: san Medardo y san Máximo, obispos; la dedicación de la catedral de Tortosa; y la de san Jaime Berthieu, presbítero.

San Medardo de Noyon, obispo

Este obispo de Noyon del siglo VI fue hijo de los francos que conquistaron la Galia. Profundamente inspirado y fascinado por la persona de Jesús, destacó por su generosidad y magnanimidad. Su reputación de santidad llegó hasta la reina Radegunda, quien quiso recibir de él el velo de religiosa cuando dejó la corte. Murió en Soissons un 8 de junio hacia el año 560, y sobre su tumba se levantó un monasterio. Algunos de sus milagros beneficiaron a los ladrones que lo robaban, y tal vez esta generosidad inspiró a Victor Hugo para su personaje monseñor Myriel en Los miserables.

San Máximo de Aix, obispo

Personaje legendario del siglo I, es considerado el primer evangelizador de la Provenza y posiblemente el primer obispo de la ciudad de Aix-en-Provence. Murió un 8 de junio, y cerca de Aix, la magnífica basílica de Saint-Maximin la-Sainte-Baume conserva su memoria.

Dedicación de la catedral de Tortosa

La actual catedral gótica de Tortosa fue consagrada en la fecha de hoy en el año 1597. Anteriormente, otra iglesia había ocupado el lugar de una mezquita. Pero ya antes de la invasión musulmana, al menos desde el año 516, Tortosa era sede episcopal.

San Jaime Berthieu, presbítero

Nació en el centro de Francia en el año 1838, y creció en el ambiente rural de Auvernia, donde ingresó en el seminario y fue ordenado sacerdote en el año 1864. Tras un tiempo ejerciendo como vicario, ingresó en la Compañía de Jesús, que lo envió como misionero a Madagascar.

En esta gran isla, junto con otros compañeros, llevaron a cabo una importante labor misionera, con la apertura de iglesias y escuelas, hasta la colonización francesa de la isla, marcada por la violencia y la represión. Los malgaches lo consideraban como un sacerdote venido del cielo y decían: “tú eres nuestro padre y madre”. En 1886 fue arrestado y, al manifestar “prefiero morir antes que renunciar a mi fe”, fue golpeado, torturado y finalmente fusilado. Fue canonizado en 2012.