Habacuc 1:12 – 2:4
Si hay situaciones que nos indignan especialmente es cuando vemos que el mal en el mundo, provocado por quienes viviendo injustamente, no reciben el castigo que se merecen. De hecho es el eterno problema del mal en el mundo. Hoy el profeta Habacuc constata esto y le pregunta a Dios que hace. Recuerda la pregunta que el Papa Benedicto XVI dijo a propósito del holocausto judío: ¿dónde estabas Dios mío? El profeta, si embargo, termina su explicación y afirma que Dios le dice: «el justo por su fe vivirá». Ante las injusticias y el mal en el mundo, ¿cuál es mi actitud, mis sentimientos, y mi fe?
Señor, hazme participar de tu sabiduría para que pueda comprender, al menos un poco, tu visión ante el mal.