Las palabras del profeta cuando dice: «Mi corazón está perturbado, se conmueven mis entrañas», fácilmente las podemos leer como si expresaran los sentimientos de Jesús. Difícilmente nosotros podemos conocer todos los sentimientos del corazón de Jesús, pero conociendo todo lo que ha hecho por nosotros, nos queda la posibilidad de admirar su don, y procurar vivir en comunión con Él.
Señor, te lo ruego, déjame conocer, al menos un poco, tus entrañas de misericordia, y poder captar tan bien como sea capaz, el significado de tu sufrimiento entre nosotros.