Lo que hoy nos cuenta el libro del Génesis es la intercesión que Abraham hace al Señor a favor de las ciudades tan corruptas como Sodoma y Gomorra. A medida que avanza la historia vemos que Abraham, queriendo salvarlas, y dándose cuenta de las pocas garantías que ofrecen, intercede a favor de ellas, pero rebajando su exigencia de justos que debe haber en aquellas ciudades, para que el Señor no las castigue. A lo largo de la Biblia encontramos personajes que hacen de intercesores, como Samuel, Amós, Jeremías, Moisés, hasta llegar a Jesucristo. Cuando rezas, ¿tienes presente que también puedes ser intercesor ante Dios?
Señor, apiadaos de tantos hombres y mujeres que necesitan vuestra misericordia para recobrar la verdadera libertad y poder obrar con justicia.