El libro del Eclesiastés llama a los jóvenes a reflexionar para que se percaten que no siempre se encontrarán en su plenitud. «Sí, acuérdate de tu creador antes de que sea cortado el hilo de plata de la vida…» ¿Qué hemos aprendido a lo largo de nuestra vida?
Como dice el salmista, ojalá que podamos decir: A lo largo de todos los siglos, Señor, has sido siempre nuestra muralla.