Hebreos 9:2-3.11-14
Otra cosa que nos recuerda la carta a los Hebreos: «Cristo… en virtud del Espíritu eterno, se ha ofrecido a Dios como sacrificio sin mancha, podrá purificar nuestra conciencia de las obras muertas, llevándonos al culto del Dios vivo».
Las consecuencias de la oblación de Cristo han sido maravillosas. Acuérdate a la hora de dar culto a tu Dios vivo.