En el Deuteronomio leemos: «Ama al Señor, tu Dios, obedécelo, séle fiel, y en Él encontrarás la vida». Efectivamente en el amor siempre encontraremos estos dos rasgos que le acompañan: la obediencia y la fidelidad. ¿Soy capaz de amar obedeciendo?
Jesús lo hizo hasta la cruz, y una vez lo hizo nos abrió, para todos, la vida en la resurrección.
Última actualització: 6 marzo 2025