El profeta Oseas nos recuerda: «Vuelve, Israel, al Señor tu Dios, porque tropezaste por tu falta». Presenta como una ofrenda tu arrepentimiento, vuelve al Señor y dile: «Perdónanos las culpas, y acepta el buen deseo». Estas palabras háztelas tuyas. Cuando lo vivas de verdad, nos representarás todos. Gracias.