Hoy encontramos un testimonio diferente y singular si lo comparamos con los que habitualmente estamos acostumbrados a conocer. Balaán: un profeta; así debemos interpretar la presentación que se hace en el texto cuando dice: «oráculo del hombre de ojos perfectos; oráculo del que escucha palabras de Dios…», y que, a pesar de su condición de extranjero, anuncia una nueva era para los creyentes: «Avanza una estrella de Jacob, y surge un cetro de Israel». Para nosotros es evidente que anuncia el Mesías.
Señor, de muchas maneras anuncias la voluntad de tu presencia entre nosotros; que sepa acoger, en mi itinerario de fe, hombres que, como Balaán, son profundos, auténticos, sinceros, fieles y que han conocido la fuerza de tu don.