Hoy, día 20 de marzo, celebramos la festividad de san Martín de Braga o de Dumio, obispo; y la del beato Ambrosio de Siena, religioso.
San Martín de Braga, obispo
Martín, originario de Panonia (actual Hungría), nació alrededor del año 510-520. Dedicó años de su vida a peregrinar por Constantinopla, Egipto y Palestina, donde tuvo contacto con los monjes y los textos de los santos padres. Después de pasar por Roma y las Galias, llegó a la Gallaecia, instalándose en Braga, la capital del reino de los suevos. Allí trabajó fructuosamente en la conversión de los suevos arrianos y, más tarde, fundó el monasterio de Dumio (actual Dume).
Fue ordenado como el primer obispo de Dumio (que comprendía el monasterio y sus dominios) y, tras algunos años, llegó a ser arzobispo primado de Braga. Convocó un concilio en aquellas tierras para intentar erradicar las prácticas paganas aún presentes. Es una de las principales personalidades de la Iglesia visigoda. Dejó un buen número de escritos morales y ascéticos, así como algunas obras de carácter canónico y litúrgico. Falleció un 20 de marzo del año 580 y fue enterrado en la catedral de Dumio. Venerado como santo por diversas confesiones cristianas, su canonización es antigua.
Beato Ambrosio de Siena, religioso
De familia noble, nació en Siena (Toscana) en el año 1220 con el cuerpo lleno de malformaciones, pero estas desaparecieron milagrosamente cuando tenía un año de vida. A los diecisiete años ingresó en la Orden de los Dominicos, desde donde fue a estudiar a las universidades de París y Colonia. En la universidad tuvo como maestro a san Alberto Magno y fue compañero de estudios de santo Tomás de Aquino.
Fraile dominico, predicó por toda Europa y colaboró activamente con la Santa Sede como mediador de conflictos entre diversas ciudades europeas. A pesar de los varios intentos del papa por nombrarlo obispo, nunca aceptó. Es especialmente conocido por haber llevado una vida de mucha oración, por los dones místicos que recibió y por su misericordia y amor desinteresado hacia los peregrinos, enfermos y presos. Falleció en Siena un 20 de marzo alrededor del año 1286. Su beatificación data de 1622.