La profecía de Daniel nos recuerda el juicio final: «Muchos de los que duermen en el polvo de la tierra despertarán: unos para vida eterna, otros para vergüenza e ignominia perpetua». ¿Cuáles son los sentimientos que se desvelan en tu interior cuando lees esta profecía? ¿Cuáles son los sentimientos que deberías tener?
Señor, que, como el salmista, mi corazón repose confiado.